La capacidad para influir en la conducta de otros es clave para entender porqué esta competencia se busca tanto en las organizaciones políticas, económicas y sociales, como en una gran mayoría de personas.

El Líder puede nacer, pero también puede «hacerse». El Poder no concede la capacidad de influir o cambiar las cosas, puede ser una palanca, pero más importante que ella es la autoridad. Y el Líder tiene autoridad:

  • por su carisma
  • por sus conocimientos o capacidad reconocida
  • porque conecta emocionalmente con los demás, procurando satisfacción comunicando la visión y dando sentido a la tarea

La diferencia competitiva y estratégica en la sociedad del siglo XXI es que las empresas dispongan de directivos que sumen al poder de posición (que ya tienen) la autoridad e influencia del Líder; desarrollando a sus directivos en Líderes de equipo que hagan posible la superación de los estándares de calidad, productividad y satisfacción de los profesionales a su cargo. Haciéndoles más creativos, innovadores y capaces de gestionar el Cambio.

El Liderazgo ejercita cinco competencias core, tanto racionales como emocionales, estas son: Comunicación, Persuasión, Gestión del Equipo, Gestión del Conflicto, Toma de decisiones.

Asimismo el Líder precisa de un Marco de control emocional que facilite tanto el conocimiento de las emociones propias y su control, como las de los demás (empatía) y desde luego la capacidad de automotivación.

Pero todas estas facultades no sirven en tanto no sean vehículos de una capacidad de visión junto con un carácter decidido a asumir riesgos y afrontar dificultades. Por eso hay tan pocos ¿? líderes en el mundo. En cambio hay demasiados managers-funcionarios más preocupados por su status, bonus o posición. En la esfera política es aún más preocupante esta situación ya que no hay mecanismos de evaluación objetiva ni de resultados, ni de desempeño. Es un reto para la sociedad disponer en el marco de la democracia participativa de Partidos políticos con dirigentes que puedan y deban responder de sus actos tanto de gestión como de elaboración legislativa.