Cada día que pasa cobra con más fuerza y sentido que la «Hora de Rajoy» está llegando a su fin. El escándalo Rato ha derivado en una contundente crítica interna por la forma y el fondo en que se ha originado, gestionado y actualmente está siendo conducido por Mariano Rajoy.
La desafortunada intervención ante el Congreso del Director de la Agencia Tributaria (ver post anterior) en relación al fraude y política fiscal de este gobierno, ha puesto contra la pared al ministro de Hacienda y por «contaminación amiga» al titular de la cartera de Economía Luis de Guindos. Precisamente dos de los pilares del discurso económico positivo que está utilizando el Partido Popular en este año electoral.
Este si es un asidero fuerte para la oposición si pretende llegar hasta el final, incluso con la presentación de una Moción de Censura que visualizaría claramente la existencia de una Alternativa de Gobierno a la actual mayoría absoluta del PP. Pero para ello han de darse dos requisitos:
- La Decisión política del PSOE de apoyar a su Secretario General Pedro Sánchez a protagonizar dicha Moción y de paso probar si merece el apoyo mayoritario en las elecciones Primarias de julio y
- La Pureza de los Dirigentes del PSOE y excargos públicos socialistas ante la posible utilización de la «lista de defraudadores» en manos del Gobierno. No sea que haya en esa lista diversos y numerosos ciudadanos con el carnet del PSOE.
Mientras, en Sevilla la Feria de Abril estalla en color y alegría y Griñán puede hacer un servicio más al PSOE dejando su escaño. Ojala otros le acompañen. Por respeto y verguenza política.
Al Partido Popular le queda un cartucho de postas, José María Aznar. Solo falta que su amiga y valedora Esperanza Aguirre obtenga un buen resultado en Madrid para que el RE CAMBIO se plantee. Atentos al plasma.